Senadores Universitarios electos invitan a encarar el desafío: «Reconstruir lo público dentro de la Universidad de Chile»

Los días 21 y 22 de junio, los estudiantes acudieron a las urnas para votar por sus representantes, quienes tendrán por misión discutir y aprobar, junto a los Senadores representantes de los estamentos académico y funcionario, los principales reglamentos universitarios y las políticas y estrategias de desarrollo para nuestra Casa de Estudios. Reconocen la complejidad de la función que inician oficialmente el 28 de agosto, debido al maltrato que ha recibido la educación pública y a los desafíos pendientes que tenemos como Universidad. Junto a las críticas, los nuevos Senadores coinciden en que es importante comprender las lógicas de autofinanciamiento de las Universidades públicas, por las cuales no habría sólo que “defender la educación pública”, sino que “volver a construirla”.

Yerko Montenegro: “Al hablar de la U. de Chile hoy, no estamos hablando de una universidad pública como tal. Porque los gobiernos de turno la han avasallado e internamente se ha dedicado a administrar este malogrado modelo. La investigación, por ejemplo,  se ha volcado en demasía al área privada, abandonando su perfil público donde debiera ser señera”.

 

Sebastián Aylwin: “Esto exige que en las aulas se vuelva a discutir constantemente sobre cómo construir una sociedad mejor. El Estado tiene que financiar a las universidades públicas, pues son ellas las que tiene que cumplir ese rol”.

 

Scarlett Mac-Ginty: “El Senado Universitario debiera preguntarse cuál es el verdadero rol público de la Casa de Bello y analizar la relación entre este organismo y las fundaciones –legalmente de derecho privado y sin fines de lucro-  que se han creado en gran medida para cubrir el 86% de financiamiento que no entrega el Estado a la institución”.

Ariel Russel: «Instancias como el Senado Universitario deben usarse para la transformación de la Universidad en el sentido de lo público, de país y de planificación: No solamente de parte del Estado, sino también de las mismas comunidades que hoy están pensando en hacer universidad”.


Loreto Fernández: “Hoy la U existe desde la defensa corporativa, lo que actualmente significa remar en la misma dirección que el modelo privado de educación. Buscamos hacer de la U un espacio digno de defender, pasar de ser particular-subvencionada a ser un referente de lo público, en sus dinámicas y quehaceres  como en su relación con el país.

Leyla Olguín: “Me interesa trabajar en el Presupuesto, porque es necesario hacerse cargo de la redistribución y transparentar a las fundaciones de la U. PDI, porque debe ser producto de una discusión triestamental. Acceso, porque debe ampliarse. Bienestar, porque es fundamental para la permanencia. Investigación, porque debemos liberar el conocimiento y trabajar en colaboración interdisciplinaria”.

Irací Hassler: “Construir educación pública, gratuita y de calidad para todos también pasa por casa. Me presenté al Senado porque veo que la reforma educacional también se construye desde acá, profundizando la democracia y poniendo a la U realmente al servicio de las grandes mayorías”.

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